En Malvinas murieron 650 argentinos y dolieron como todas las muertes sin sentido. Hoy ese número es casi diario debido al coronavirus.

Aquella vez el Estado los mandó al matadero sin siquiera advertirnos.

Hoy hace lo imposible para que entendamos que debemos cuidarnos. Ayer no pudimos evitarlo, no pudimos advertirlo, no pudimos siquiera decirlo, nos faltaba libertad.

Paradojas, hoy la libertad que tenemos nos hace vulnerables a los contagios. Queremos preservarla a cómo de lugar, aún sumando muchas muertes

NATURALIZAMOS LA MUERTE, vemos los informes epidemiológicos, con la misma naturalidad que el informe del tránsito, el estado del tiempo o qué número salió en la quiniela vespertina.

Pero ¿Cuántos muertos necesitamos para darnos cuenta? ¿Cuántos?

¿No te alcanzan la de alguno amigo que seguro no pudiste despedir? ¿Los papás de alguno otro que también murieron?

¿No te bastan los del vecino que ves publicado en algún portal? ¿En serio todavía pensás que como no te toco a vos no te va a tocar?

Te recomiendo el poema de Niemöller, ese que dice "... primero vinieron por los comunistas, no me preocupe yo no lo era...". Acá la que viene a buscarte es la muerte, a vos no parece asustarte, ni aún sabiendo que morís solo.

Para que el espejo no te devuelva tu falta de empatía, como en muchos órdenes de la vida le echas la culpa a otro, en este caso al Estado, que ya no sabe cómo decírtelo. Claro que cometió errores, que no hay suficientes vacunas, que nos encerró mucho tiempo antes, que las fronteras son permeables, etc.

Cosas que le pasan a casi a todos los países pobres del mundo y a muchos de los ricos también. Mañana podremos hacer el balance y cargar responsabilidades, pero hoy es mucha nuestra.

Sino lo haces por vos, porque te crees inmune hacelo por los abuelos, por tus viejos, por los que se cuidan por padecer alguna patología, por los enfermeros, por los médicos, por los recolectores de basura que son esenciales, por los policías, por los de tránsito.

Hacelo en memoria de los muertos, de los que la están pelando entubados, por los que están rezando y abrazan su fe para salvar a quien aman.

La lista puede ser infinita, hacelo por quien elijas, pero POR FAVOR HACELO, CUÍDATE.