El boxeo argentino está de luto por la muerte de Emiliano Fabricio Priotti, una promesa a nivel nacional. El pugilista tenía 22 años y fue encontrado sin vida en el departamento en el barrio porteño de Saavedra que compartía con amigos y colegas. El hecho causó una gran conmoción en el ambiente y se investiga la causa de su deceso.
A las 23.30 de ayer dos amigos de Emiliano llegaron a su dormitorio y se encontraron la puerta cerrada con llaves. Una vez que pudieron ingresar encontraron muerto el cordobés nacido en Villa del Rosario, pero criado en Río Segundo.
“Hubo que romper la puerta para poder entrar a la habitación. Por temas de rutina se hacen las averiguaciones del caso y se está entrevistando a los amigos que vivían con él. No hay indicios de intervención de una tercera persona”, señalaron fuentes de la investigación.
El Chango, como se lo conocía, era un gran prospecto del pugilismo, donde comenzó a destacarse en el plano amateur. Era muy dedicado en los entrenamientos y se hizo muy querido en los gimnasios.
Una vez que saltó al ámbito profesional siguió con los buenos resultados y llegó a tener un invicto en el peso mosca con cinco peleas ganadas, tres de ellas por KO producto de sus certeros golpes de zurda.
Su última participación databa de una velada en la fecha 7 de Boxeo de Primera Promocional. En su agenda lo esperaba pelea el venidero 9 de septiembre, en el Casino Buenos Aires, según informa el sitio A la Vera del Ring.
El mencionado portal apuntó que el Chango era hermano de Sergio “Piluso” Priotti, otro destacado baluarte del pugilismo argentino. Ambos llegaron a integrar la selección nacional. Emiliano fue entrenado por Miguel Rojas, conocido en el ambiente como Rojitas.
Emiliano se estrenó en el ring y tuvo como mentor a Fabián Gómez. Luego fue el pupilo de Jorge Ochenduszka, quien lo acompañó en su campaña que tuvo un franco ascenso por su buen nivel y resultados.
