La cantante disfrutó del partido junto a la familia de Kelce como una fanática más y gritó con entusiasmo. Posteriormente, Kelce reveló que había pretendido conocer a la cantante durante uno de sus conciertos, llevándole una pulsera con su número de teléfono.

Su estrategia de conquista tuvo éxito, y Taylor Swift finalmente apareció en uno de los estadios donde jugaba Kelce, en Kansas, marcando el comienzo de su historia de amor.

Travis es una persona divertida y sensible, lo que lo popularizó como alguien carismático dentro y fuera del campo de juego. Su relación con Taylor Swift elevó su perfil de popularidad, y su camiseta se convirtió en una de las más vendidas de la NFL.

Segundo show de Taylor Swift

Con los acordes de “Karma” aún flotando en el ambiente, la cantautora bajó de las escaleras del escenario y se dirigió a los camarines saludando a su público. Allí, bajo la ovación de la multitud, la esperaba Travis.

Al divisarlo, apuró el paso y se fundieron en un abrazo y un apasionado beso que provocó la ovación de quienes tuvieron el privilegio de presenciarlo.

El resto del estadio, todavía en shock por las más de dos horas de concierto, se preguntó que podría haber sucedido para semejante explosión.

En redes sociales, ya era tendencia el beso entre la cantante y el deportista, la escena más hermosa de la comedia romántica que se puede contar por estos días en Buenos Aires.

Sin embargo, la semana libre de su equipo coincidía con la parada de Taylor Swift en Argentina, lo que trajo su presencia en el país.

La historia de amor entre Taylor Swift y Travis Kelce se hizo pública hace algunos meses. Durante un partido de fútbol americano, todas las miradas se dirigieron al palco donde se encontraba la familia Kelce, incluida la propia Taylor Swift.